KEPA ARBIZU
Hace unos pocos años Jim Jones Revue aparecieron como un auténtico terremoto en la escena musical. Tanto su disco debut, homónimo, como sus directos dieron cuenta de una banda que mezclando rock and roll clásico con la actitud punk lograba un resultado arrebatador y de gran potencia.
A pesar de contar con tres años escasos de longevidad no estamos ante gente recién llegada a la música. Su cantante Jim Jones ya ha participado de otros proyectos como los interesantes Thee Hypnotics o Black Moses.
Si hubiera que definir el sonido del grupo británico se podría hacer mezclando el significado que desprende dos de sus portadas. En su debut aparecía un viejo piano desvencijado y en el recientemente editado “Burning your house down” se puede ver una casa ardiendo. La primera perfectamente podría hacer referencia al papel clave de ese instrumento y de algunos músicos que han sacado el mejor provecho de él como Jerry Lee Lewis o Little Richard y que son una clara influencia en el sonido de Jim Jones Revue. Por otro lado el modo contundente e incendiario con que materializan esos mimbres es más que evidente.
Su nuevo disco, el tercero si contamos “Here to save your soul” que recopilaba sus singles e incorporaba dos temas inéditos, no difiere sustancialmente de anteriores grabaciones. Estilísticamente no hay grandes cambios. Lo único reseñable es la labor del productor Jim Sclavunos (Nick Cave & The Bad Sedes/Grinderman, Cramps, Sonic Youth) que ha ayudado a que el sonido de las canciones sea algo menos “sucio” que los predecesores. Quizás no sea este el mejor contexto para el tipo de música que hace esta banda pero a la larga no influye de manera determinante en el resultado final.
Escuchar a Jim Jones Revue es todo una experiencia, su sonido es un auténtico huracán surgido de esa mezcla en la que se entrelazan los clásicos del rock and roll ya comentados y otras bandas dadas al desenfreno sin control como Stooges, Sonics o Jon Spencer Blues Explosion.
De ese magnífico “totum revolutum” nacen temas como “Dishonest John”, ”Elemental” (una de las dos canciones, junto a la que da nombre al disco, que aparecía en el anterior trabajo) o "High horse", en la que la voz de Jim Jones trae ecos evidentes de Little Richard, incluso en sus gritos, al igual que sucede en la espléndida “Righteous wrong”, que aunque baja algo el tempo su forma de cantar desgañitada es imponente.
Otro de los elementos que aparece para mezclarse con el torbellino que construye el grupo es el hard-rock en la onda de los Faces, Aerosmith o los mismos Rolling Stones, como queda en evidencia en temas como “Foghorn” o “Premidated” que demuestran una cara más festiva o bailable dentro de la agresividad típica de la banda.
Hay algunos momentos donde el disco sufre una deceleración en sus revoluciones. No significa necesariamente una mala noticia, sobre todo viendo el resultado final de temas como “Big Len” o “Burning your house down”, que muestra cierta influencia del blues y que de nuevo la voz suena portentosa, atronando como un Tom Waits totalmente pasado de vueltas.
Jim Jones Revue actualiza el viejo y primario rock and roll sin hacer que pierda un ápice de su fuerza y sobre todo manteniendo la actitud de una música que nació para molestar a los bienpensantes y que irritaba a los padres cuando escuchaban salir del cuarto de sus hijos esos alaridos. Ese desenfreno se encuentra en estos británicos.
Escrito originalmente para:
http://www.tercerainformacion.es/spip.php?article18327
Hace unos pocos años Jim Jones Revue aparecieron como un auténtico terremoto en la escena musical. Tanto su disco debut, homónimo, como sus directos dieron cuenta de una banda que mezclando rock and roll clásico con la actitud punk lograba un resultado arrebatador y de gran potencia.
A pesar de contar con tres años escasos de longevidad no estamos ante gente recién llegada a la música. Su cantante Jim Jones ya ha participado de otros proyectos como los interesantes Thee Hypnotics o Black Moses.
Si hubiera que definir el sonido del grupo británico se podría hacer mezclando el significado que desprende dos de sus portadas. En su debut aparecía un viejo piano desvencijado y en el recientemente editado “Burning your house down” se puede ver una casa ardiendo. La primera perfectamente podría hacer referencia al papel clave de ese instrumento y de algunos músicos que han sacado el mejor provecho de él como Jerry Lee Lewis o Little Richard y que son una clara influencia en el sonido de Jim Jones Revue. Por otro lado el modo contundente e incendiario con que materializan esos mimbres es más que evidente.
Su nuevo disco, el tercero si contamos “Here to save your soul” que recopilaba sus singles e incorporaba dos temas inéditos, no difiere sustancialmente de anteriores grabaciones. Estilísticamente no hay grandes cambios. Lo único reseñable es la labor del productor Jim Sclavunos (Nick Cave & The Bad Sedes/Grinderman, Cramps, Sonic Youth) que ha ayudado a que el sonido de las canciones sea algo menos “sucio” que los predecesores. Quizás no sea este el mejor contexto para el tipo de música que hace esta banda pero a la larga no influye de manera determinante en el resultado final.
Escuchar a Jim Jones Revue es todo una experiencia, su sonido es un auténtico huracán surgido de esa mezcla en la que se entrelazan los clásicos del rock and roll ya comentados y otras bandas dadas al desenfreno sin control como Stooges, Sonics o Jon Spencer Blues Explosion.
De ese magnífico “totum revolutum” nacen temas como “Dishonest John”, ”Elemental” (una de las dos canciones, junto a la que da nombre al disco, que aparecía en el anterior trabajo) o "High horse", en la que la voz de Jim Jones trae ecos evidentes de Little Richard, incluso en sus gritos, al igual que sucede en la espléndida “Righteous wrong”, que aunque baja algo el tempo su forma de cantar desgañitada es imponente.
Otro de los elementos que aparece para mezclarse con el torbellino que construye el grupo es el hard-rock en la onda de los Faces, Aerosmith o los mismos Rolling Stones, como queda en evidencia en temas como “Foghorn” o “Premidated” que demuestran una cara más festiva o bailable dentro de la agresividad típica de la banda.
Hay algunos momentos donde el disco sufre una deceleración en sus revoluciones. No significa necesariamente una mala noticia, sobre todo viendo el resultado final de temas como “Big Len” o “Burning your house down”, que muestra cierta influencia del blues y que de nuevo la voz suena portentosa, atronando como un Tom Waits totalmente pasado de vueltas.
Jim Jones Revue actualiza el viejo y primario rock and roll sin hacer que pierda un ápice de su fuerza y sobre todo manteniendo la actitud de una música que nació para molestar a los bienpensantes y que irritaba a los padres cuando escuchaban salir del cuarto de sus hijos esos alaridos. Ese desenfreno se encuentra en estos británicos.
Escrito originalmente para:
http://www.tercerainformacion.es/spip.php?article18327