6 mar 2013

Los Coronas, rock and roll de alto calibre sin palabras



KEPA ARBIZU

Meterse en un grupo de rock no parece la recomendación más idónea si lo que se busca es notoriedad o reconocimiento relativamente generalizado. Todavía se vuelve más tajante dicha idea si la propuesta fuese hacerlo en uno de formato instrumental. Casualmente hay una banda, Los Coronas, que utilizando ese estilo se han consagrado no sólo como uno de sus máximos representantes (aunque no sean los únicos) sino también como receptores de una aceptación muy por encima de lo esperable en este tipo de contexto. Una situación que en buena parte es consecuencia del talento y pericia de sus músicos. 

Surgidos a principios de los noventa como un proyecto alternativo de Fernando Pardo, integrante de Sex Museum, y David Krahe (No Wonder), las sucesivas incorporaciones, y sus correspondientes cambios de formación, a lo largo de los años no han impedido un incremento paulatino en su consistencia tanto en lo musical como en su estructura, hasta llegar a alcanzar un nivel que les ha llevado a embarcarse en nuevos proyectos como la reciente unión con Arizona Baby bajo el nombre de Corizonas. 

El éxito de esta colaboración no ha supuesto descuidar su “casa madre” y recientemente han publicado su nuevo disco, “Adiós Sancho”. Que haya sido grabado en Tucson y bajo la producción de Craig Schumacher, habitual en trabajos de músicos como Calexico, DePedro, The Sadies o Giant Sand, no sirve sólo para lucir currículum, sino que encaja perfectamente con un trabajo que se desenvuelve en terrenos arenosos, fronterizos pero también locales, por si el título elegido y la portada de una mujer con peineta no lo hubiera dejado claro. Una ambientación en la que pondrá su granito de arena el hecho de haber sido registrado en formato analógico y en directo. 

 Lo que podríamos entender como parte del sonido clásico de la banda seguirá muy presente a lo largo de todo el álbum. “Miss Alamo” se mueve a base de un rock and roll twist apacible que derrocha clase. Con el mismo sentido pero más fiestera y con un evidente regusto a guateque se presenta “Dance Danny Dance”. El surf, un ingrediente esencial en la música de los madrileños, será parte de temas como “Cleopatra Stomp” o “Rockaway Surfers” (donde parece atisbarse un homenaje a The Ramones), la primera más incisiva pero en las que se trasluce la influencia de Dick Dale o Link Wray entre otros. 

Existen aquí una serie de temas, que de manera más explícita, forman lo que se podría denominar la parte más latina, e incluso hispana, del disco. Utilizando varios de ellos se podría conformar algo así como la banda sonora de un “Spaghetti western”, donde cada uno respondería a un ambiente muy determinado. “La leyenda del solitario” o “Baila Lola” desprenden gotas de flamenco, siempre insertadas en el contexto propio del grupo. En ellas destaca una sublime trompeta, instrumento que alcanza altas cotas de protagonismo en el disco como se demuestra también en la profunda “Adiós Sancho”. Mientras “Fuerte Comansi” tira de intensidad y tensión, “Un buen día para morir” y “Way to San José” muestran una cara más bucólica y /u onírica. 

La capacidad musical de cada uno de los integrantes de Los Coronas está más que demostrada. La unión de todos ellos ha dado forma a un proyecto con un sabor muy reconocible y capaz de superar el reducido ámbito de la música instrumental. Por si fuera poco tienen la habilidad de, sin bajar el listón, no repetirse y ofrecer siempre novedades en sus grabaciones. En el caso concreto de “Adiós Sancho” incrementan ese sonido hispánico a las referencias habituales de la banda sin bajar un ápice su calidad. 

Escrito originalmente para: http://tamtampress.es/2013/03/05/los-coronas-rock-and-roll-de-alto-calibre-sin-palabras/